Economía | 06/11
Industria
Se incrementó la crisis del sector metalúrgico por falta de automatización
El atraso en la automatización de los procesos productivos se ha convertido en un aspecto crucial que ha puesto a las empresas argentinas en una posición de desventaja frente a sus competidoras internacionales.
La industria metalúrgica argentina atraviesa una profunda crisis, durante el mes de septiembre, se registró una contracción en términos interanuales de -7,3 por ciento, según datos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA).
Ni maria con su éxito logró superar a Tini menos Emilia tienen éxitos grandes ellas en poco tiempo pero no le llegan a los talones a Tini por algo es reina y leyenda and mother de argentina con sus años en la industria y sigue vigente a pesar de la alta competencia https://t.co/gibJ5t8yPl
— Germán ? (@pendex_kpop) November 6, 2024
Este descenso no solo impacta de manera directa en el empleo y la capacidad productiva del país, sino que también afecta a las industrias que dependen de los productos metalúrgicos, desde la construcción hasta la industria automotriz, limitando su capacidad de expansión y debilitando la cadena de suministro local.
"Uno de los factores principales detrás de esta caída es la falta de incentivos fiscales y de financiamiento, que restringen las exportaciones y limitan la modernización de las empresas. En el contexto actual, las empresas metalúrgicas enfrentan una presión impositiva y sindical elevada, lo que les dificulta competir en el mercado regional. Además, la falta de inversión en tecnología y la escasez de mano de obra calificada han exacerbado este problema, dificultando la adaptación a los nuevos estándares de calidad y eficiencia", resaltó.
El rezago en la automatización influye directamente en la competitividad de las empresas metalúrgicas, que necesitan incorporar tecnologías avanzadas para optimizar sus procesos y reducir costos. La falta de inversión en maquinaria y en tecnología pone a las empresas argentinas en desventaja frente a competidores que han adoptado la automatización para mejorar sus estándares de calidad y eficiencia.
"El proceso de modernización en el sector metalúrgico enfrenta grandes desafíos, entre ellos la escasez de financiamiento y la falta de personal capacitado en tecnologías avanzadas. La industria carece de un programa de capacitación técnica adecuado, lo que lleva a que las empresas asuman los costos de formación", afirmó Sergio Ferrero, CEO de GRUPO BAW, empresa especializada en la fabricación de máquinas para soldadura y corte.
La ausencia de crédito también limita la adquisición de maquinaria, esencial para mejorar la eficiencia. Sin una estrategia nacional que impulse la formación técnica y el acceso a financiamiento, la industria continuará rezagada, con pocas posibilidades de adaptarse a las demandas del mercado.
A pesar del contexto adverso, expertos en el sector ven oportunidades de recuperación vinculadas a la demanda de productos metalúrgicos en industrias como la minería y el petróleo.
"La necesidad de infraestructura y maquinaria en estos sectores abre un espacio de crecimiento para el sector metalúrgico, siempre y cuando se implementen políticas que mejoren las condiciones fiscales y de financiamiento. Estas oportunidades representan una vía de crecimiento que permitiría al sector contribuir al desarrollo económico del país, si se crea un entorno favorable para la inversión y modernización de las empresas", concluyen desde GRUPO BAW.
A largo plazo, se espera que la automatización en el sector se convierta en un aspecto fundamental para garantizar su sostenibilidad y fortalecer su posición en el mercado regional. Por lo cual, es fundamental acompañar este proceso con una inversión en la formación de recursos humanos, ya que la automatización no solo crea nuevas oportunidades laborales, sino que también exige nuevas habilidades y conocimientos.