Otros Municipios | 16:26
No se puede creer...
Cuando el odio se postea: vecinos exigen sanciones contra un empleado municipal de Nueve de Julio por burlarse del autismo
El señalado es Ignacio "Nacho" Pizarro.
Un fuerte repudio social se desató en el Municipio de Nueve de Julio luego de que vecinos expusieran en redes sociales una publicación realizada por un empleado municipal, Ignacio “Nacho” Pizarro, cuyo contenido fue considerado ofensivo, discriminatorio y violento.
El episodio tomó estado público tras la difusión de un mensaje publicado recientemente por Pizarro en sus redes sociales personales, donde escribió: "Los que realmente deberían disculparse son los padres de los niños autistas que nos cagaron las fiestas al resto. Y también a los que abandonaron algún perro en la calle sin castrar".
La frase generó una inmediata reacción de indignación entre vecinos, familias y organizaciones vinculadas a la inclusión y los derechos de las personas con discapacidad.
La situación fue dada a conocer por el medio local Periodismo Sin Censuras, que no solo difundió la captura de la publicación sino que además expresó una dura condena pública contra el empleado municipal.
Desde el medio señalaron: "Siempre podemos encontrar personas que no valen la pena, pero mal nacido como este personaje y burlándose de los chicos con autismo no tiene perdón de nada. Últimas consecuencias con este tema y no voy a parar hasta que te sancionen".
El escrache virtual rápidamente se trasladó al plano comunitario, con múltiples vecinos reclamando explicaciones y sanciones por parte del Municipio. En particular, se cuestiona la permanencia de Pizarro dentro de la estructura municipal, considerando que sus dichos no solo resultan ofensivos sino que contradicen principios básicos de respeto, convivencia e inclusión que debería sostener cualquier trabajador del Estado.
Hasta el momento, no trascendió información oficial sobre medidas disciplinarias adoptadas por el Municipio, aunque la presión social continúa en aumento. El caso reabrió el debate en Nueve de Julio sobre la responsabilidad de los funcionarios y empleados públicos en el uso de redes sociales y los límites entre la expresión personal y el daño social que generan discursos discriminatorios, especialmente cuando están dirigidos contra niños y familias que conviven con el autismo.
