"Le cuidaba la espalda en el laburo", es la frase que más resuena en La Matanza cuando se habla de la relación de Cillia con Espinoza, con quien se lo vincula a varias tareas de testaferro en diferentes negocios de la dupla.

A ellos se suman otros testaferros y portadores de rostros que respondían a Cillia para poder llevar adelante grandes negocios con inmensos movimientos de dinero.

Las investigaciones retoman los vínculos de Cilia con Espinoza, en lugares estratégicos como "Peronia", un lugar gastronómico en el cual se realizaban los encuentros con chicas y al cual asistieron en su momento Brenda y Lara, esta última menor de edad.

Cillia no solo salpica el círculo del kirchnerismo duro, hoy también se lo vincula a Miguel Ángel Calvete con quien organizaba los meetings para los directivos de laboratorios con varios millones de dólares y pagos adelantados en caso de imprevistos.

La caza jurídica mediática de Cillia no cesa y los investigadores estarían detrás de aquellos testaferros que en su nombre manejaban dinero y rodear el círculo de amigos del empresario.