La gestión de Florencia Saintout al frente del Instituto Cultural de la provincia de Buenos Aires es alarmante. Con el aval del gobernador bonaerense Axel Kicillof, aprobó en los últimos días un despilfarro millonario para 2 contrataciones que muestran una clara falta de eficiencia y transparencia en el uso de fondos públicos.

Por un lado, adquirió zapatillas de ballet con sobreprecio. Por el otro, dio luz verde un contrato destinado al servicio de limpieza por el que pagarán una cifra elevada.

A principios de junio, Saintout y Kicillof aprobaron una compulsa por contratación menor y llamaron a concurso a tres proveedores para iniciar el proceso de licitación 547-0079-CME24. El objetivo era adquirir 221 pares de zapatillas de punta y 265 pares de zapatillas de media punta para el Instituto Cultural bonaerense.

Inicialmente, se dispuso de un presupuesto de 92.187.400 pesos, pero finalmente se abonará casi el doble.

El proveedor Martín Ezequiel Dabeni ofreció sus servicios por un monto total de 108.388.700 pesos, mientras que Sebastián Daniel Kapit propuso un presupuesto de 100.484.266 solo por las zapatillas de punta. 

Cada par de zapatillas de punta Gaynor se compró por 371.900 pesos, cuando su precio de mercado es de 287 mil. Las zapatillas de media punta se adquirieron a 81.100 por par, comparado con el precio más alto del mercado de 190 mil. Esto refleja un sobreprecio del 95,74 por ciento.

En otra polémica decisión, Saintout también aprobó un gasto de más de 1400 millones para la limpieza del Instituto Cultural durante un año. Esta medida se conoció poco después de que el gobernador Kicillof declarara que la provincia estaba en crisis económica y que apenas pudieron cumplir con el pago del medio aguinaldo.

El pliego licitatorio de este contrato no solo contempla la elevada suma de más de 100 millones de pesos mensuales para limpieza, sino que también permite una ampliación del 35 por ciento del monto total adjudicado. Esta medida fue calificada como excesiva dado que el Instituto Cultural no es un organismo de gran envergadura dentro del armado provincial.

Las contradicciones parecen ser una constante en la conducta de la titular del Instituto Cultural bonaerense. Hace poco más de un mes, Saintout aseguró que "el estado nacional está desertando de sus obligaciones" y destacó el delicado estado de la estructura financiera provincial. Esta declaración llamó la atención, especialmente cuando los medios de comunicación resaltaron la costosa vestimenta que llevaba puesta.

Recientemente, Florencia Saintout afirmó que "ahora más que nunca, tenemos que apostar a la cultura". Sin embargo, esta apuesta innecesaria le costará más de un millón de dólares a una provincia que no puede siquiera mantener las paritarias para sus docentes.

Las decisiones de Saintout no sólo contrastan con sus propias declaraciones sobre la situación financiera, sino que también evidencian una desconexión preocupante con las prioridades y necesidades reales de los bonaerenses.