
Política | Ayer
Exclusivo
Dura respuesta al discurso del "libertario" Sebastián Pareja: "¡No somos súbditos!"
"Somos pueblo", sentenció el dirigente bonaerense Sebastián Franco.

En las últimas horas, la tensión política en la Tercera Sección Electoral bonaerense escaló tras las declaraciones de Sebastián Pareja, referente de La Libertad Avanza (LLA), quien advirtió que “quienes no respetan el armado de la provincia no respetan al Presidente”. Una frase que, según el espacio opositor Tiempo de Todos, raya en el autoritarismo más que en un liderazgo emanado del pueblo.
Desde Tiempo de Todos, la agrupación que viene creciendo con fuerza en distritos como General Pueyrredón y localidades aledañas, emitieron una contundente réplica: “Ese mensaje es propio de una monarquía, no de una república. ¿Desde cuándo disentir con un armado político significa atacar al presidente?”, cuestionaron.
El comunicado oficial del espacio subraya que la política no puede reducirse a una estructura vertical en la que “solo el linaje azul tiene derecho a hablar”. “En el Conurbano aprendimos que la sangre no habilita; lo que habilita es el compromiso con el vecino, demostrado en la calle y en el barrio, con quienes sufren las consecuencias de un sistema que cada dos años aparece a prometer y nunca cumple”, agregaron.
Según Tiempo de Todos, la verdadera lealtad no reside en obedecer órdenes sin cuestionar, sino en representar genuinamente los intereses populares. “Nosotros no obedecemos: representamos, escuchamos, caminamos y dialogamos. Nos preocupamos por cómo vive la gente, no por cuidar cargos”, sostuvieron.
El espacio hizo además un llamado a recuperar la esencia de la democracia: “Disentir no es traicionar, es construir. Defender la libertad no es repetir lo que otro dice, sino atreverse a pensar distinto. ¡Basta de los mismos de siempre!”, concluyeron.
Con miras a las elecciones del próximo 7 de septiembre, Tiempo de Todos remarcó su plataforma centrada en “educación de calidad, salud digna, seguridad real y trabajo genuino”, y animó a los ciudadanos a votar “sin dádivas, sin miedos, con libertad y coraje”.
La respuesta de Tiempo de Todos marca un pulso político claro: rechazar cualquier intento de silenciar la disidencia y reivindicar el rol activo del ciudadano en la construcción democrática.