En una emotiva ceremonia celebrada el pasado sábado en La Posada Encantada de Yanquetruz y Los Pilagas, barrio Bosque Peralta Ramos, el juez federal Alfredo López fue distinguido con el Premio Fortunatos del Mar 2025, un galardón que rinde homenaje al primer intendente marplatense, Fortunato de la Plaza.

El reconocimiento, entregado en el marco de una gala que reunió a cantantes, músicos, cómicos, empresarios, agrupaciones, sindicatos, deportistas, periodistas y medios de comunicación, destacó la figura del magistrado, ampliamente conocido por sus controvertidos fallos y declaraciones públicas. La entrega del premio fue organizada por Patricia Girola, Luis Cortez y Roberto César Moraiz, quienes aseguraron una noche cargada de simbolismo y compromiso con los valores tradicionales.

Durante su discurso, el juez López enfatizó su defensa inquebrantable en favor de “las 2 vidas”, reiterando su postura en contra del aborto. “Mi compromiso es proteger la vida en todas sus etapas, defendiendo tanto a la madre como al no nacido”, declaró, en palabras que resonaron con los asistentes y que marcan claramente su línea ideológica.

Además, el magistrado destacó su lucha contra lo que él denomina la “Plandemia” del Covid-19, criticando las políticas sanitarias implementadas durante la crisis y posicionándose como un férreo opositor a lo que considera una gestión inadecuada de la emergencia sanitaria.

El Premio Fortunatos del Mar 2025 se suma a una larga tradición de homenajes en la ciudad, reconociendo a aquellas figuras que, desde distintos ámbitos, han dejado una huella en la cultura y la vida social de Mar del Plata. En esta edición, la figura del juez López se une a un variado grupo de premiados, lo que evidencia la diversidad de sectores que se celebraron aquella noche.

Con este reconocimiento, el juez López no solo reafirma su compromiso ideológico, sino que también refuerza su posición como una de las voces más polémicas y mediáticas del fuero federal marplatense. Mientras sus detractores cuestionan sus decisiones y discursos, sus simpatizantes lo ven como un baluarte en la defensa de valores tradicionales.

La ceremonia, cargada de simbolismo y emociones, deja en claro que el Premio Fortunatos del Mar 2025 es mucho más que un galardón: es una declaración de intenciones en un contexto social y político cada vez más polarizado.