En La Libertad Avanza, las internas no son una novedad, pero en el último tiempo se intensificaron tras la derrota del 7 de septiembre, cuando varios coordinadores del conurbano bonaerense fueron acusados de entregar los distritos al kirchnerismo a cambio de dinero y de oscuros negociados que estaría llevando adelante Sebastián Pareja.

El coordinador del espacio, Luis Ontiveros, está en el centro de la controversia, acusado de fraude en la fiscalización. No solo se lo señala por excluir de las tareas de control a miles de militantes libertarios, sino también por quedarse con el dinero que recibió del partido. Uno de los concejales, Ricardo Lococo, lo cuestionó duramente por intentar expulsarlo de un colegio:

“El domingo pasado, 7 de septiembre, con parte de mi equipo fuimos a visitar escuelas donde existía la posibilidad de que no hubiera fiscales. Hicimos una recorrida por varios circuitos justamente para corroborar que todo estuviera en condiciones. Nadie iba a auditar ni nada parecido; al contrario, íbamos a ofrecer ayuda a nuestra gente. Llega el coordinador, quien se molesta al verme en el Colegio Santo Domingo de Ramos Mejía y pide que me retiren”.

“Entonces, vimos irregularidades y se lo remarcamos, pero su reacción fue de prepotencia e insolencia. Parecía que estábamos en bandos opuestos. No fue un peronista el que me echó, sino el responsable del espacio”, afirmó Lococo.

Los cuestionamientos sobre la fallida fiscalización recordaron a algunos militantes lo sucedido en 2023, cuando vieron que el dirigente se había quedado con dos millones de pesos, haciendo figurar fiscales de mesas fantasmas que, según dicen, no existían pero aparecían anotados.

También comenzaron a circular rumores sobre negociaciones en el distrito entre el coordinador y Fernando Espinoza, mientras las huestes de Santiago Caputo monitorean en redes estos movimientos sospechosos que van desenmascarando al parejismo.

La presión digital llevó a Sebastián Pareja a avanzar con la agrupación “Los Inquebrantables” para silenciar a los críticos, ya que, de lo contrario, la tropa libertaria pronto los tendría rodeados y con todo su armado expuesto.

Este grupo, del que forma parte Ontiveros, fue creado recientemente con la militancia más dura de Pareja para disciplinar a la disidencia interna. Ya fue denunciado penalmente por el abogado Walter Brizzio, quien defiende a los militantes libertarios que fueron escrachados y amenazados en plataformas digitales, incluso con mensajes como: “El que busca ensuciarnos será duramente ajusticiado”.

Una frase casi sacada de El Padrino, que expone las costumbres de la vieja política que Ontiveros aprendió junto a Sebastián Pareja cuando militaban con Emilio Monzó. A esto se suma la participación de su esposa, Lorena Ramos, quien fue expulsada del partido radical por corrupción.