
Otros Municipios | 09/08
Reclamos ciudadanos
Vecinos de José Clemente Paz exigen transparencia en las contrataciones municipales
Solicitan una auditoría ante los crecientes rumores de favoritismo político y familiar.

En el municipio de José C. Paz, el nepotismo y la corrupción generan preocupación entre los vecinos, quienes reclaman la ineficiencia de los nuevos funcionarios incorporados sin experiencia alguna y solo por ser amigos o parientes de Walter Denuchi.
La dirección de comunicaciones, a cargo de Walter Denuchi, ha incorporado mediante un nombramiento por decreto a 25 empleados sin ninguna función, que solo serían un estorbo para los 7 empleados activos que trabajan en planta permanente.
Entre los acomodados estarían en la dirección su hija Natalia Denuchi, legajo número 26293, y el hijo de su pareja actual, Lucas Primiterra, legajo número 35510.
Walter Denuchi, además de su cargo de director, es martillero público y tiene la inmobiliaria Denuchi Propiedades, que fue haciendo crecer gracias a los negocios que tiene junto al intendente Mario Ishii.
Desde el año 2007 hasta 2019, Denuchi ha amasado su fortuna a través de testaferros que, mediante empresas fantasmas, habrían negociado como proveedoras del consejo escolar, además de empresas constructoras encargadas de las obras en las escuelas, facturando directamente para él y repartiendo entre sus lacayos en el consejo escolar.
Pero lo que resultó aún más preocupante fue que varios empleados de sus empresas serían contratados por el municipio y, según afirman fuentes, son manejados “a gusto y piaccere” por Denuchi.
Algunos empleados del municipio trabajan en la inmobiliaria Denuchi Propiedades; otros lo hacen de manera particular para Denuchi en tareas domésticas en su hogar, mientras que los empleados más leales son puestos como testaferros en otras empresas.
La familia Denuchi viene hace tiempo con demandas de ex empleados municipales que fueron usados para trabajar de manera particular en una ferretería que tendrían a nombre de uno de sus testaferros.
A eso le sumamos las numerosas propiedades adquiridas en el Buenos Aires Village en Bella Vista y un departamento con cochera en San Miguel. Todo esto habría sido encubierto para que no trascendiera en distintos medios para no perjudicar la imagen del intendente Mario Ishii, pero ya no podrían contener a los municipales y el destape sería inevitable.
