La posibilidad de demoler el famoso Castillo de Banfield, en Lomas de Zamora, ha encendido una fuerte polémica entre vecinos y representantes locales.

Mientras algunos sectores del oficialismo y ciertos grupos políticos han impulsado la medida, una numerosa campaña vecinal reclama preservar este patrimonio histórico. En medio de la controversia, el concejal Alejandro Trotta se hizo presente en el lugar para acompañar a los residentes en su lucha por salvar el edificio.

El Castillo de Banfield, un vestigio arquitectónico de innegable valor histórico ubicado en la esquina de Larroque y Croce, se encuentra en el centro de un intenso debate.

Según informan diversas publicaciones en redes sociales, la iniciativa para demoler el inmueble ha sido aprobada por algunos sectores, generando la alarma de vecinos que, en masa, han organizado campañas de protesta para pedirle al municipio que proteja el edificio.

En un reciente video publicado en Instagram, se observa a vecinos denunciando abiertamente la demolición de "un castillo histórico" y exigiendo transparencia por parte de las autoridades municipales.

Estas denuncias se han viralizado en la comunidad y han sido compartidas ampliamente, poniendo en evidencia el desconcierto entre la ciudadanía ante lo que consideran una posible pérdida irreparable del patrimonio local.

El concejal lomense Alejandro Trotta, reconocido por su compromiso con la defensa de la identidad y la historia de la zona, se unió a los vecinos en el lugar. En imágenes difundidas en redes, Trotta aparece acompañando a los residentes, quienes critican la falta de información oficial sobre el futuro del castillo.

"Es fundamental que el municipio brinde respuestas claras: la historia de Banfield no puede quedar en manos de intereses privados que buscan demoler sin preservar nuestro legado", declaró uno de los vecinos presentes.

Otra publicación reciente muestra cómo, desde el bloque de Propuesta Republicana (PRO), algunos sectores han intentado impulsar la demolición, mientras que otros se han organizado en defensa del inmueble.

Esta situación ha generado incertidumbre en la comunidad, que se pregunta si la falta de señalización y el aparente allanamiento del terreno apuntan a un plan que, según críticos, prioriza intereses económicos sobre la preservación de la memoria colectiva.

En paralelo, una campaña en redes ha llamado a la acción a través del hashtag #AbrazoAlCastillo, en la que vecinos de Lomas de Zamora han iniciado una movilización para pedir que el municipio intervenga y proteja el edificio, recordando su valor histórico y cultural.

Ante la creciente presión social, diversos grupos vecinales han anunciado que en los próximos días convocarán reuniones y foros para discutir alternativas que permitan salvar el castillo y buscar un uso que beneficie a la comunidad sin destruir su patrimonio.

Mientras tanto, las autoridades municipales no han emitido un comunicado oficial que esclarezca el destino del inmueble, lo que ha incrementado la tensión en Banfield.