La interna peronista bonaerense estalló como una bomba de relojería: a solo semanas de cerrar listas para renovar 8 bancas en el Senado provincial por la Primera Sección Electoral, Cristina Fernández de Kirchner y Axel Kicillof se enrocan en una disputa feroz… ¡Por el cuarto y último lugar de privilegio!

Según Letra P, mientras CFK y sus alfiles ocupan los tres primeros escalones, el gobernador bonaerense apunta sus cañones al "puesto maldito" que quedará para los intendentes.

El reparto actual colocó históricamente a 4 peronistas alineados con CFK en los primeros cuarteles, pero la marea kicillofista amenaza con barrer viejas lealtades. Con 3 de los 4 primeros pasajes aparentemente reservados (1 para la ex mandataria, otro para Sergio Massa y el tercero para el propio Axel) la "guerra del cuarto puesto" se ha convertido en un campo de batalla donde ni los intendentes más experimentados quieren asomarse.

En la vereda de enfrente, intendentes de La Costa, San Isidro y Vicente López se disputan la oportunidad de colgarse la medalla de sobreviviente: "Perdimos un lugar este año (confiesa un jefe comunal bajo condición de anonimato) y ahora cualquiera que crea que tiene votos sale a pelear por lo que quede". Ese clima de pánico ha desatado una catarata de llamados, promesas y contraofertas internas que con cada giro alimentan el morbo político.

Desde el búnker kicillofista, la orden es clara: "Consolidar la tercera línea y quitarle espacio a las estructuras gremiales y municipales". Por su parte, el cristinismo no baja los brazos: "Si Axel cree que puede corrernos de su tablero, que lo demuestre en la cancha", advierten cerca de la senadora referenciada.

La consecuencia de este choque promete ser histórica: un intendente caído en desgracia podría sellar su derrota política de cara a 2027, mientras que el ganador se alza como el nuevo poder fáctico del conurbano norte. ¿Quién se quedará con el maldito cuarto puesto? Más allá de nombres y padrinazgos, lo seguro es que el final de esta novela apenas comienza…